Galletas o Rábanos
Lectura Santiago 1:12-15
En una Universidad se llevó a cabo un estudio sobre la tentación. A algunos participantes se les dijo que omitiesen una comida antes de que los dejasen solos con un plato de rábanos y uno de galletitas. Se podías comer los rábanos pero las galletitas estaban prohibidas.
Todo el mundo resistió la urgencia de comer galletitas, pero en algunos casos, no sin sus luchas. Fue interesante notar que la tentación hizo que les fuera difícil llevar a cabo tareas intelectuales inmediatamente después de la prueba.
El Dr. Roy Baumeister, quien dirigió la investigación, llegó a la conclusión de que el dominio propio es “algo que se gasta. Hay que reabastecerlo antes de usarlo otra vez”.
La tentación, la urgencia de hacer algo que sabemos está mal, nos perturba a todos. Puede ser un mal terrible, o tal vez algo que tendamos a excusar, como la impaciencia, el orgullo, el chisme o el mal genio.
La victoria sobre la tentación no es simplemente un asunto del poder de la voluntad. El dominio propio es un fruto del Espíritu Santo (Gá. 5:22,23). Nuestro espíritu humano débil clama por la fortaleza del Espíritu Santo.
Sólo hay una manera segura de vencer la tentación. Debemos apoyarnos en la ayuda de Dios continuamente. Cuando confiemos en él y hagamos lo que sabemos es correcto, él nos guiara a su verdad y a su santidad.
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